Cortesía Tommy Hilfiger
A pesar de ser pequeños, los países centroamericanos resultan mercados cada vez más atractivos para las grandes marcas de moda.
Los centroamericanos ya no necesitan aviones y viajes largos para toparse con la exclusiva moda francesa o acceder al lujoso estilo italiano. Basta con abordar las escaleras eléctricas del mall que visitan todos los domingos. Durante los últimos cinco años, los países del istmo se han convertido en imanes para las grandes franquicias de lujo.
Según datos del desarrollador de franquicias Francorp, en Centroamérica cerca de 40% de las franquicias pertenece al sector de la moda y además, representa el segundo sector que más crece, después de las franquicias de restaurantes.
José Roberto Fernández, director general de Francorp para Centroamérica y el Caribe, asegura que durante los últimos siete años el mercado centroamericano ha vivido un ‘’boom” de centros comerciales que favorece el crecimiento de negocios de lujo y moda.
Además, dice que el mercado centroamericano es atractivo para estas marcas por la clase media creciente, los avances en la bancarización que favorecen el acceso al crédito y los tratados comerciales con Estados Unidos y Europa.
“Las franquicias de moda internacional han visualizado nuestros mercados como potenciales para establecer una estrategia de crecimiento de sus marcas y Costa Rica es un país que ofrece una excelente ubicación, facilidades de conexión a otros mercados, cercanía y afinidad cultural con sus vecinos centroamericanos”, comenta Karol Fallas, directora ejecutiva del Centro Nacional de Franquicias de Costa Rica.
¿Moda de consumo o consumo de moda?
Que los centroamericanos gusten por la moda y consuman marcas de lujo no es algo nuevo, pero el crecimiento y expansión de ese consumo sí. Según Boston Consulting Group, el consumo de lujo en Centroamérica creció aproximadamente 12% en el 2013. Además, se espera que durante los próximos cinco años las franquicias de moda crezcan al menos 6%. Es decir, la moda está de moda en la región.
Uno de los ejemplos es Panamá, que ya cuenta con lujosos negocios y en las próximas semanas tendrá Soho Mall, desarrollado por Grupo Wisa. Este centro comercial tendrá marcas como Louis Vuitton, Chanel, Prada, Burberry, Bottega Veneta, Fendi, Bvlgari, Ralph Lauren, Rolex, Dior, Valentino, Carolina Herrera, YSL, Jimmy Choo y Ladurée, entre otras.
“Es un tema cultural, en los países de Centroamérica la gran parte de la sociedad considerada clase media a media alta tiende a ser muy aspiracional y por ello cuida mucho su imagen. Esta población de un perfil socioeconómico medio aspira a contar con artículos de lujo aunque tenga que realizar un verdadero esfuerzo para obtenerlos”, explica Silvia Murillo, vocera de Salvatore Ferragamo en Costa Rica.
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