
“Establecer nuestra presencia en este complejo comercial es un hito en nuestra estrategia de crecimiento y demuestra la importancia del mercado ruso”, ha explicado Frederic Cumenal, vicepresidente ejecutivo de Tiffany.
El punto de venta, el primero que Tiffany opera directamente en el mercado ruso, se suma a la apuesta de la compañía por mercados emergentes como Asia. En esta región, la compañía incrementó sus ventas un 15% en el primer trimestre de su ejercicio fiscal, mientras que en su mercado interior elevó su facturación un 6%.
Tiffany cerró los tres primeros meses del ejercicio (periodo concluido el pasado 30 de abril) con una cifra de negocio de US$895 millones, lo que supuso un crecimiento del 9% respecto al mismo periodo de 2012. El resultado de la compañía se situó en US$83,57 millones, frente a los US$81 millones del primer trimestre del año anterior.
A cierre del primer trimestre, Tiffany sumaba un total de 275 establecimientos (115 de ellos ubicados en Estados Unidos), frente a los 251 de doce meses antes.
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