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País es el segundo en América Latina en tener una
norma técnica dirigida a la eliminación de brechas de género en el
empleo. El instrumento establece requisitos desde el reclutamiento de
personal, hasta la salud integral de las y los trabajadores.
El Instituto Nacional de las Mujeres (INAMU), y el Instituto de Normas Técnicas de Costa Rica (INTECO), dieron a conocer esta tarde la norma INTE 38-01-01:2013 “Sistema de Gestión de Igualdad y Equidad de Género (SIGIEG) – Requisitos”, la cual permitirá a las empresas públicas y privadas desarrollar políticas y acciones que eliminen las brechas de género en el empleo que generen.
“Con esta norma el INAMU promueve la igualdad y equidad de género en el trabajo y nos sumamos a este tipo de instrumentos y procesos en concordancia con lo que plantea el artículo 44 de la Ley 8272 del Sistema Nacional para la Calidad, en el sentido de que las instituciones públicas debemos apoyar y financiar este tipo instrumentos”, destacó Isabel Chamorro, ministra de la condición de la Mujer y Presidenta Ejecutiva del INAMU.
De acuerdo con Cristian Leñero Testart, presidente de INTECO, “la norma INTE 38-01-01:2013 constituye una herramienta para la implementación de un Sistema de Gestión de Igualdad y Equidad de Género (SIGIEG) en las organizaciones que deciden, de forma voluntaria, involucrarse directamente en el proceso de reconocer las brechas de género que existen en su interior y, posteriormente, aplicar medidas de igualdad y equidad que las eliminen”.
Con el lanzamiento de la norma INTE 38-01-01:2013, Costa Rica se convierte en el segundo país en América Latina que cuenta con una normativa en sistemas de gestión dirigida a la eliminación de brechas de género en el empleo, siendo esta necesaria para mejorar la calidad del mismo, especialmente el de las mujeres, y un valor agregado a los negocios.
La ministra de la Mujer comentó que el ideal es que “para los próximos años, existan más organizaciones contratando a mujeres y hombres en diversas ocupaciones y puestos; con políticas para conciliar la vida laboral con la vida familiar, creando centros de cuido, con permisos para que las madres y los padres asistan a reuniones de la escuela, lleven a sus hijos e hijas al médico, atiendan a personas enfermas y adultas mayores; con políticas y acciones que desalienten el hostigamiento sexual y el acoso laboral”.
Leñero explicó que con la aplicación de la norma INTE 38-01-01:2013 se está promoviendo un proceso de “reconversión mental” en procura de fortalecer la inversión en capital humano y social, bajo condiciones de igualdad y equidad de género. “Lo que se busca es que en este proceso, todas las personas involucradas aprendan a reconocer cuándo y cómo se deben generan acciones que permitan eliminar la discriminación y, consecuentemente, propongan soluciones”, señaló el presidente de INTECO.
Para la implementación de esta norma, las organizaciones deberán, en una primera instancia, establecer, implementar y mantener procedimientos documentados para: identificar las brechas de género reales y
potenciales al interno de la entidad; determinar la magnitud de las brechas de género; y priorizar las brechas de género significativas para disminuirlas.
Con este análisis, la organización debe establecer, documentar, implementar y mantener objetivos y metas entre mujeres y hombres en campos como: el reclutamiento de personal, la remuneración e incentivos, el acceso a capacitaciones, la participación equitativa en la toma de decisiones, la salud sexual y reproductiva, la violencia de género, el acoso laboral y el hostigamiento sexual, así como el ordenamiento de jornadas de trabajo, de seguridad y salud ocupacional y resolución de conflictos, entre otros.
Las instituciones públicas o privadas que deseen certificarse con esta norma, deben cumplir a cabalidad con los derechos laborales establecidos en la legislación costarricense.
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