Nuevas urbes: Todo en un mismo lugar

Los mejores y más innovadores proyectos inmobiliarios en Centroamérica

Bristol Hotel & Residents. Nueva inversión en Ciudad de Panamá.

Fuente: Luis Diego Quirós, editor en jefe de corresponsalías Miércoles, 29 de Mayo de 2013 19:47 (modificado) La región no escapa a las tendencias mundiales, que combinan viviendas, comercio y oficinas en los proyectos inmobiliarios.

Colaboraron: Johanna Camargo, Leonardo Coca, Claudia Contreras, Hernán Guerra, Zuha Kafati Díaz.
Para los habitantes de América Central, República Dominicana y Colombia, los desarrollos mixtos y las mini-ciudades ya no son cosa del futuro, pues los grandes desarrolladores de proyectos individuales aprovechan el gran potencial que ofrecen estos proyectos cuyo mayor atractivo es la posibilidad de vivir, comprar y trabajar en un mismo lugar, así como lo mejor en cuanto a acabados, tecnología y máxima seguridad.

Guatemala

La capital guatemalteca se ha quedado pequeña y sus casi tres millones de habitantes tratan de encontrar los lugares más cercanos para residir. Por su parte, el sector inmobiliario también se las ingenia con proyectos urbanísticos donde los vecinos tengan todo a la mano: oficinas, residencias, comercio, distracción y un entorno ecológico.

Este es el caso de Ciudad Cayalá, desarrollo en la periferia capitalina que irá por fases. La primera, Paseo Cayalá, inaugurada hace dos años, ofrece comercios, vivienda, condominios y edificios de apartamentos. “Aunque nuevo en el país, es un diseño importado de Europa, donde se desarrollaron proyectos neo-urbanistas después de la Segunda Guerra Mundial”, explica Pedro Ramírez Fiat, quien tiene la experiencia de casos urbanísticos en Guatemala.

Estos conjuntos “responden a la necesidad de convivir en lugares más cómodos, seguros y más cercanos de las grandes urbes, evitando así el estrés y brindando una mejor calidad de vida”, explica el arquitecto Ramírez. “Cayalá es un town center: una gran ciudad dentro de la misma ciudad”, añade.

A menor escala, en Guatemala también ha sido desarrollado Plaza Fontabella; con un diseño arquitectónico compuesto por oficinas, comercio, exposiciones de arte, restaurantes y apartamentos.


Los proyectos mixtos se distinguen porque representan una tendencia de ir recuperando espacios para que las familias disfruten de la comodidad que significa tenerlo todo en un mismo lugar. No obstante, el profesional cree que lo más difícil para estas pequeñas ciudades es encontrar terrenos adecuados, debido a que se necesitan amplias áreas.
Cayalá abarca 215 hectáreas de terreno que combinan vivienda, comercio, cultura y entretenimiento. Las construcciones para vivienda se componen de apartamentos (verticales) y casas individuales (horizontales).

El Salvador

Ubicado entre los municipios de San Salvador y Antiguo Cuscatlán, en 138 hectáreas de terreno, está Distrito El Espino. Es una nueva apuesta del grupo constructor Urbánica Dueñas Hermanos, enfocada en la demanda habitacional de la clase media alta y alta, que incluye área comercial, residencial, corporativa, hotelera e institucional.
“Desde hace más de diez años, cuando surgió Urbánica, tuvimos esa visión de desarrollar la propiedad de forma que resultara ser una área con diferentes usos de suelo y que atendiera a las necesidades de la gente. Se ha planificado como una pequeña ciudad”, señala Alejandro A. Dueñas, director ejecutivo de Urbánica.
Urbánica comparte el desarrollo del Distrito El Espino con Grupo Roble, donde está la torre de apartamentos El Pedregal y Multiplaza San Salvador. En su plan maestro, Roble también tiene en la mira construir una torre corporativa junto a El Pedregal. En la zona también comparte espacio la sede principal de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en El Salvador. Para Dueñas, Distrito El Espino es un proyecto estrella desde todas sus áreas en conjunto.

Desde 2004, la inversión de Urbánica en la zona asciende a US$165 millones, con proyectos como La Gran Vía, La Castellana, Portal La Ribera, Portal del Casco, Portal Canarias, Portal Gran Canarias y Portal La Palma. La propuesta de vivienda ofrece condominios horizontales, town houses y condominios verticales.
Las proyecciones para expandir Distrito El Espino siguen en pie; sin embargo, el empresario aseguró que la prontitud con la que se lleven a cabo los proyectos planificados dependerá de la demanda o la tendencia de crecimiento de la economía. Para este año se prevé la construcción de un segundo hotel de servicio limitado en La Gran Vía, que se encuentra en la etapa final de su planificación. Urbánica también planea una segunda área corporativa en el mismo uso mixto que permite La Gran Vía. “Ya está planificado, el producto ya está desarrollado; pero nos falta el seguimiento, debido al leve crecimiento o casi nulo crecimiento que ha tenido El Salvador en los últimos años”, sostiene el empresario.
Distrito El Espino también agregaría la instalación de un hospital o de una torre o condominio para clínicas médicas.

Honduras

A causa del alto crecimiento poblacional y la tendencia a concentrarse en áreas urbanas, el condominio se ha convertido en una opción muy atractiva para las familias.
Según directores de la Cámara Hondureña e Industrias de la Construcción (CHICO), la nueva Ley de Propiedad en Condominios aprobada el año pasado promoverá la construcción de nuevos desarrollos para residencias, comercio, turismo e industria de Honduras. Con la aprobación de esta nueva norma, se pretende promover el desarrollo de predios para uso mixto, que podrían ser centros comerciales o modernas comunidades que combinen usos residenciales y comerciales en el mismo lugar, reguladas y administradas de forma armónica.
En opinión de Diana Villeda, empresaria del proyecto de la Bahía de Tela, “la Ley de Propiedad y Condominios protege a aquellos compradores extranjeros y brinda garantía de seguridad”. El sector empresarial cree que esta regulación destaca las construcciones mixtas en el país para que compitan con las de países vecinos como Guatemala y El Salvador.

En ciudades como San Pedro Sula, Tegucigalpa, La Ceiba e incluso algunas zonas de Roatán está proliferando la construcción de condominios verticales para uso comercial, de oficinas y residencial. Uno de esos casos es Altia Business Park, que requiere una inversión de us$15 millones. Este desarrollo, cuya inauguración está prevista para noviembre de 2013, generará mil empleos directos y más de 5.000 indirectos en la zona norte del país.
Su proyecto de más alto nivel es Altara Centro Comercial y Lifestyle Center, que se perfila como uno de los más exclusivos y modernos de la zona. Está concebido para atender las necesidades del parque tecnológico Altia Business Park, Unitec y zonas aledañas. “En el costado oeste del centro comercial estará Altia Place Hotel, una estructura de ocho pisos y setenta habitaciones ejecutivas”, explica Kathia Yacamán, gerente de Mercadeo de Grupo Karims, firma desarrolladora de Altia. Al mismo tiempo, se construye el campus más moderno de Unitec, que tendrá la capacidad para atender a un mercado de consumidores garantizado de más de 35.000 personas.
En las zonas turísticas ocurren casos similares. El Infinity Bay Spa & Resort de Playa, en Roatán, al oeste de la Playa en el Cayo, es un condominio de tres pisos ―considerado hasta ahora la edificación más alta de la zona― rodeado de playa, con interacción social y vida nocturna.
Desde otro punto del país, en la zona aledaña a la Isla de Amapala (sur) se pretende construir “una ciudad modelo que contemplaría un puerto con una capacidad hasta de 10.000 contenedores, un aeropuerto, universidades de prestigio mundial, centros médicos, centros financieros, centros de investigación y una modalidad de apartamentos para las personas que decidan habitar en la zona”, señaló Carlos Ávila Molina, quien presentó la maqueta de este proyecto arquitectónico al consejo de ministros en abril.

Nicaragua

En Nicaragua surgen varios proyectos inmobiliarios-turísticos cuyos principales segmentos de mercado son los jubilados norteamericanos, ejecutivos y familias de clase media y alta del país, entre ellos destacan ciudadelas de construcciones verticales: Viejo Santo Domingo, Villas del Cortijo, Gran Pacífica y Milagro del Mar.

Viejo Santo Domingo es una ciudadela desarrollada en seis hectáreas al sur de la capital nicaragüense, que dispone de 21 residencias, noventa apartamentos, una plaza comercial y una casa club.
Villas del Cortijo es un complejo de casas y apartamentos corporativos concebidos y diseñados para atender las necesidades de ejecutivos y visitantes de la Zona Franca Internacional Cosmapa, en la zona de Chinandega.
Gran Pacífica, desarrollo de eci Development, es una ciudadela ubicada en un terreno de más de mil hectáreas, con seis kilómetros de playa y a 67 kilómetros de Managua. Los precios de las casas y los apartamentos oscilan entre US$42.500 y US$280.000. Gran Pacifica dispondrá de centro comercial, restaurante, hotel, campo de golf, canchas de tenis y piscinas.
Milagro del Mar, proyecto de hb Internacional, también ofrecerá condominios y villas residenciales. Este nuevo complejo urbanístico-turístico está a una hora de Managua. Aquí inició la construcción del Wyndham Hotel and Resorts.

Costa Rica

En la última década, varios desarrolladores costarricenses apostaron por la construcción de condominios verticales en los centros urbanos, en donde la gran novedad es que el primer piso corresponde a comercios, los siguientes dos o tres niveles a oficinas y el resto a viviendas.
Sobresalen proyectos como los desarrollados por Grupo Inmobiliario del Parque, que es uno de los pioneros en el repoblamiento del centro de San José. Su primer desarrollo fue Vistas del Parque, una torre de catorce niveles, seis locales comerciales, nueve oficinas y 18 apartamentos. El proyecto tuvo tan buena aceptación que siguieron con más edificios similares hasta llegar a Torres Paseo Colón ―el edificio más alto del país―, con 97 metros de altura y 27 pisos. Tiene 106 apartamentos, 69 oficinas y cuatro locales comerciales.

Muy cerca están los Condominios 6-30: dos torres de 16 pisos y 228 apartamentos desarrollados por Hogares de Costa Rica. Este proyecto destaca porque en el mismo cuadrante fueron construidos tres torres de oficinas y un hotel.
El primer desarrollo mixto que se puede considerar como mini-ciudad en Costa Rica es Avenida Escazú. Concebido por sus propietarios (Portafolio Inmobiliario) como el primer centro de estilo de vida en Costa Rica, ofrece comercio, centros médicos, viviendas, hoteles y restaurantes, cual si fuese una pequeña urbe. Tiene 21.000 metros cuadrados de oficinas, 98 apartamentos, salas de cine, sesenta consultorios, tiendas y restaurantes.
Contigua a esta “ciudad” está Plaza Tempo, que integra un centro corporativo categoría A+, en un edificio de cinco niveles, un área de comercio con 38 locales y un hotel. El proyecto cuenta con 16.000 m2 de espacios para oficinas, 6.300 m2 para comercio y 11.500 m2 para el hotel. Grupo Agrisal invirtió más de us$60 millones.
“Plaza Tempo ofrece tecnología de punta y una arquitectura de vanguardia, en el marco de un desarrollo sostenible”, explica Ricardo Augspurg, director de Operaciones Inmobiliarias de Grupo Agrisal.
En la misma zona es construido Distrito Cuatro, a cargo de la empresa gtu Desarrollos. Se trata de un proyecto de cinco hectáreas y us$50 millones que tendrá 230 apartamentos, supermercados, comercio, oficinas y restaurantes.
A 17 kilómetros de San José, Grupo Garnier & Garnier desarrolla Hacienda Espinal, un proyecto de 137 hectáreas y us$20 millones, que contará con viviendas, apartamentos, oficinas, comercio, 3,8 kilómetros de ciclovías, parques, piscinas recreativas y deportivas, gimnasio, canchas de tenis, amplias áreas de esparcimiento, anfiteatro, supermercado, colegio y town center.
En otras ciudades fuera del área metropolitana capitalina también hay oportunidades para los desarrollos mixtos. Uno de los casos más reconocidos es Solarium, frente al Aeropuerto Internacional Daniel Oduber (Liberia), que cuenta con zona franca, hotel de 179 habitaciones, oficinas, locales comerciales y viviendas.

Panamá

En lo que respecta a desarrollos mixtos, los desarrolladores panameños ofrecen viviendas unifamiliares y multifamiliares, así como zonas comerciales, pero no todas cuentan con espacios destinados para oficinas, debido a la ubicación de sus terrenos. En el caso de las mini-ciudades, “hay bulevares más anchos que las calles normales del resto de la ciudad, así como seguridad interna, zonas destinadas para escuelas, iglesias, rutas peatonales, ciclo-rutas e incluso canchas de golf”, explica Enrique Asensio, presidente de la Cámara Panameña de la Construcción (CAPAC).
El ejecutivo señala que si bien existen proyectos horizontales y verticales de ambos tipos en Panamá, sobresalen los verticales por los precios de los terrenos. Destaca Costa del Este, lujoso proyecto mixto de más de trescientas hectáreas en la capital, que incluye viviendas, zonas comerciales, parques industriales y oficinas. En la lista de proyectos mixtos figura Panamá Pacifico, en donde hay viviendas, principalmente destinadas a los ejecutivos de las multinacionales apostadas en este espacio; oficinas y zonas comerciales.
Asensio también habla del proyecto Green Valley, “que se concibe como una eco-ciudad que estructurará unidades de vivienda, recreación y comercio, aprovechando el entorno natural para conseguir un desarrollo sostenible”. Según sus gestores, esta iniciativa exige a los compradores que construyan de acuerdo con el reglamento interno sostenible.
Este profesional también menciona Ciudad Costa Verde, alojada entre los distritos de Chorrera y Arraiján, cuyo plan maestro contempla áreas para viviendas, industria, desarrollos comerciales, de recreo, para instituciones y escuelas, además de una reserva forestal.
En esta misma línea de la naturaleza, pero en una escala adquisitiva mayor, sobresale la comunidad privada Embassy Club, que tiene casas, apartamentos, residential spa & fitness center, café, ballroom, owner’s lounge, sala de juegos, piscinas, canchas de tenis y putting green, entre otras amenidades.
En lo que respecta a comunidades de playas, se puede hablar de Bijao Beach Club & Residences, con casas, hotel, restaurantes, bares, jacuzzi y senderos. Próximamente inaugurará su club deportivo con canchas de voleibol de playa, tenis, fútbol y baloncesto. Por su parte, los propietarios de las viviendas en Buenaventura tienen acceso a un campo de golf, zonas comerciales (con cafeterías, enfermería, club para niños, tiendas de regalos, centro de actividades para adolescentes y spa), iglesia, club ecuestre y el hotel jw Marriott Panamá Golf & Beach Resort.

República Dominicana

Son muchos los atributos que debe tener una ciudad para que sus visitantes la consideren atractiva. En Santo Domingo son conscientes de eso, por lo que están tomando previsiones para que la primera ciudad del nuevo mundo vuelva a convertirse en “la puerta de entrada al Caribe”. Para lograrlo, en la capital dominicana se erige una serie de construcciones que alojarán centros comerciales, oficinas y en algunos casos viviendas, llamados a satisfacer las necesidades de los habitantes y turistas.
Uno de ellos es Novo-Centro, edificio de 18 plantas que fue construido en el corazón de Santo Domingo. “Estamos enfocados mucho en el entretenimiento de la familia en un ambiente sano y seguro. Lo que estamos creando es un tipo de negocio diferenciado de la oferta actual”, dice Ricardo Molini, vicepresidente de Novo-Centro.
La torre incorpora un concepto integral atractivo, compuesto por áreas comerciales, hotel de lujo, restaurante lounge y mirador con 360 grados desde sus 76 metros de altitud. Los tres primeros pisos están dedicados al área comercial, mientras que los dos primeros niveles están conformados por el centro comercial, que abarca un área de aproximadamente 6.000 metros cuadrados cada uno.
El tercer nivel está ocupado por el food court y el parque infantil Pekepolis, con opciones variadas e instalaciones para el entretenimiento de los niños. Además, este piso comparte el lobby del hotel. La inversión de Novo-Centro, propiedad del grupo venezolano Intercentro Trade Center, asciende a us$65 millones.
Otro de los proyectos es Sansoucí, a cargo de la compañía Inversiones Turísticas Sansoucí, que pretende crear una mini-ciudad a partir del puerto de Santo Domingo, con un concepto marítimo. Es un proyecto mixto que está revolucionando el paseo marítimo de Santo Domingo. En un área aproximada de unos 485.000 m², el objetivo del plan de desarrollo inmobiliario es crear un centro urbano de uso mixto compacto, integrado, seguro y enfocado a las personas, utilizando los más altos estándares de diseño y calidad de construcción. Tendrá edificios residenciales, comerciales, hoteleros, institucionales y para oficinas.

Colombia

En un país tan grande y con ciudades en constante movimiento, los desarrollos mixtos son primordiales para ofrecer buenas opciones de inversión. Rodrigo Quijano, gerente de Century 21 Metroin, afirma que el crecimiento económico del país ha hecho necesario aumentar la oferta de oficinas, servicios financieros, grandes locales y centros comerciales; es allí donde surge este tipo de soluciones.
Al respecto, María Victoria Ospina, gerente de mercadeo de la firma, señala que este tipo de proyectos son de fácil comercialización y las ventas de los locales funcionan bien. “El tema de alquileres es un poco más lento, pues a veces no cuentan con muchos parqueos y los de visitantes son muy costosos”, asegura. Es común encontrar grandes torres de oficinas que tienen en sus primeros pisos locales para bancos, servicios de mensajería y papelería y al lado se encuentra una plazoleta de comidas o comercial.
Un factor determinante es la seguridad, así como la ubicación cercana a medios de transporte masivo, variada oferta gastronómica, gimnasios y salas de conferencias de alta tecnología. “El suelo cada vez es más escaso, lo cual obliga a conquistar grandes alturas para la consecución de generosos edificios de vivienda, comercio y oficinas”, dice Quijano.
En cuanto a las ciudadelas, hay varios ejemplos promovidos por iniciativas públicas y privadas como los macro-proyectos y las 100.000 viviendas gratuitas. Se urbanizan grandes extensiones de terreno y los constructores adquieren varias manzanas para diseñar viviendas, comercio y centros comerciales. Una de las ciudades en donde se palpa este proceso es Cali. Las 21 mega-obras viales y el impulso del Sistema de Transporte masivo Mío (que sacó de circulación la mayoría de los buses antiguos) actualizan la infraestructura de la ciudad. Si se suman las inversiones extranjeras que está atrayendo la agencia de promoción Invest Pacific, se observa un incremento en la demanda de vivienda y, a su vez, del precio del metro cuadrado.
Hay expectativas con la llegada del nuevo Plan de Ordenamiento Territorial (pot) porque, a diferencia de las principales metrópolis, en Cali aún queda mucha tierra para construir casas. También se habla mucho del proyecto bd Bacatá, que se anuncia como el complejo arquitectónico más ambicioso que se construye actualmente en el país, el cual se posicionará como el nuevo ícono de la renovación del centro de Bogotá. Se trata de un rascacielos compuesto por dos torres, una de ellas la más alta de Colombia, con 66 pisos y 114.384 m2 de construcción. Tendrá cinco usos: vivienda, oficinas, hotel, centro comercial de convivencia y parqueo. Ha sido conceptualizado como un moderno resort urbano, pensado para vivir, trabajar, comprar, hospedarse y disfrutar de la conveniencia. Con una inversión US$120 millones, estará a la altura de los más importantes proyectos inmobiliarios de Miami y Nueva York.

Ciudades modelo

Un modelo que integre la preservación del medio ambiente, urbanización y desarrollo sostenible —similar al de Curitiba (Brasil), Hong Kong o las ciudades de Corea del Sur— es el referente para crear en Honduras las llamadas “ciudades modelos” o ciudades chárter.
El 23 de enero de este año, el Congreso Nacional de Honduras aprobó la Ley para la Creación de los Regímenes Especiales de Desarrollo, que contempla, entre otros aspectos, el proyecto de las ciudades modelo. Según la nueva legislación, estas zonas quedarán sujetas a un régimen especial, serán autónomas funcional y administrativamente, con personalidad jurídica independiente y tendrán un régimen fiscal especial.
Se estima que diez ciudades en el territorio hondureño serán evaluadas por una comisión gubernamental para el comienzo de estas mini-ciudades, cuyos inversionistas aseguran que impulsará el desarrollo económico del país. Hasta el momento, el gobierno de Corea donó US$4 millones para los trabajos iniciales de las también llamadas “ciudades modelo”. Tres serán creadas en el Valle de Sula (norte de Honduras), en la zona de Puerto Castilla, en la costa Caribe y en el sur del país.
El grupo inversionista MGK invertirá US$15 millones para comenzar con la infraestructura básica de la primera ciudad modelo, con lo cual pretenden crear 5.000 empleos en los próximos seis meses y hasta 200.000 empleos en el futuro.
Los inversionistas de estos desarrollos mixtos implementarán proyectos de recuperación ambiental, optimizando el uso de los recursos naturales, para crear ciudades sustentables. Es así como esta tendencia se enmarca en una corriente de mayor impulso tecnológico, con excelencia en servicios y una vida urbana sustentable.